Ohio & Michigan La Prensa by Richard Romero The question of the future of Puerto Rico needs to be addressed from the perspective of the United States dealing with Puerto Rico and its people from a Civil Rights perspective. If Puerto Rico was a state, the U.S. would pay more attention that people on the island are experiencing high levels of unemployment, and are realizing under an educational system that is in need of help and funding—a health care system that needs to be updated and made equal to those hospitals in the states. n the 1970s, Puerto Rico created the 936, which was an incentive program that gave corporations tax breaks to locate on the island. It positioned Puerto Rico to attract many companies that wanted to take advantage of this tax break. However, in 1996, under the Clinton Administration, the program ended without a strategy of making sure those companies who had been operating in Puerto Rico for over 20 years stayed in Puerto Rico. In 2000, under the Bush Administration, they made a decision to stop bombing the islands in Puerto Rico as part of their military training—in doing so, the elimination of these U.S. Army bases cost the island some 25,000 jobs and 300 million dollars from the economy (of Puerto Rico) thereby adding to Puerto Rico’s economic problems. Puerto Rico has had very little say as to what its future looks like, mainly because it does not have voting representation in the U.S. Congress. Puerto Ricans have fought and defended the United States to the tune of over 1 million Puerto Ricans loosing their lives in the various wars but can not vote for their Commander-in-Chief. Puerto Rico’s healthcare system has become so bad that many families have to fly their loved ones to hospitals in the United States, because the lack of responsible healthcare systems has not been a priority for the United States. The island of Puerto Rico could be the bridge to economic prosperity for the United States because of its location. Puerto Rico as it is now can’t directly begin to speak to Latin American countries about possible economic opportunities without first receiving approval from Congress. Puerto Rico could be the perfect testing ground for bio-technology, green energy solutions, transportation solutions, the insurance industry, the banking industry, and the list is endless. Until Puerto Ricans and the United States determine what role Puerto Rico will play as part of the United States, the question of Puerto Rico’s status will continue to be a divisive subject with no real benefits to the people of the island and the people of the United States. There is no doubt that we live in the best country in the world, and I am very proud to be an American citizen whose parents came from Puerto Rico. If we are truly the best country in the world, then we as Puerto Ricans should take great pride in making sure that Puerto Rico, a property of the United States, is accorded the same rights as the mainland Puerto Ricans receive. For this to happen, the Puerto Ricans on the island need to come together and look at what’s best for its people, which is to be truly part of the greatest country in the world. Once the island people have concluded that it’s going to require that the mainland Puerto Ricans support, we will all have to work hard to hold Congress and the President accountable to the beautiful property known as Puerto Rico.
martes, 21 de abril de 2009
Civil Rights & Equality for Puerto Rico “Puerto Rico’s Relationship within the Federal Union”
Publicadas por R@S a la/s 8:39 p. m. View Comments
La referencia a Puerto Rico
ENDI.COM José A. Delgado En su discurso inaugural de la pasada Cumbre de las Américas, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, advirtió que hubo dos grandes ausentes de ese cónclave regional: Cuba y Puerto Rico. Por tal razón, Ortega mantuvo que la reunión del pasado fin de semana no fue verdaderamente una "Cumbre de las Américas". Ortega, al parecer el único que levantó en las sesiones oficiales de la Cumbre el debate sobre la indefinición política de la Isla, criticó que "el hermano pueblo de Puerto Rico" todavía esté sujeto a una política colonial estadounidense. El presidente estadounidense, Barack Obama, quien participó por vez primera de una cumbre regional, habló en su ponencia sobre Cuba, esperanzado en que América quiera mirar hacia el futuro, no hacia el pasado. No respondió oficialmente al llamamiento de Ortega sobre Puerto Rico. (De todos modos, algunos medios resaltaron que - por error-, Obama dijo que habían 36 países presentes en la reunión, aunque debió haber dicho 34). Pero, el sábado en la noche, le preguntó al comisionado residente, Pedro Pierluisi, en tono de broma según el político boricua, si se había reunido con Ortega. Horas antes, Pierluisi – quien participó de la cumbre regional como parte de una delegación del Congreso estadounidenses y propone terminar con el actual status comúnmente descrito como Estado Libre Asociado-, ya había circulado un primer comunicado de prensa indicando que "la gran mayoría de los puertorriqueños atesora su ciudadanía y la relación de Puerto Rico y Estados Unidos". Pierlusi, a su vez, dijo que cada vez que tuvo oportunidad – durante las sesiones con los jefes de Estado de los países americanos-, llevó el mensaje de que consideraba que los puertorriqueños estaban bien representados por él y el presidente Obama. Ahora queda claro que sus expresiones eran una respuesta a Ortega. De todos modos, Pierluisi indicó que aprovechó su breve encuentro del sábado en la noche con Obama – cada uno de los legisladores estadounidenses que acudió a la reunión pudo hablar durante unos dos minutos con el presidente de Estados Unidos-, para mencionarle que a mediados de mayo presentará su proyecto a favor de una consulta federal en torno al futuro político de Puerto Rico. Las palabras de Ortega en torno a Puerto Rico, aunque no alcanzaron gran difusión internacional, representaron un recordatorio de que en Latinoamérica sigue vivo el reclamo a favor de la libre determinación e independencia de la Isla, un tema que Estados Unidos algunas veces sólo parece tener que atender durante los debates anuales del Comité Descolonización de las Naciones Unidas. Para el récord, el texto íntegro de la referencia de Ortega a los casos de Cuba y Puerto Rico, fue el siguiente: "Esta Cumbre, que me niego a llamarla Cumbre de Las Américas... sí, aquí estamos presentes una gran mayoría de los Presidentes, Jefes de Gobierno de América Latina y El Caribe, está participando el Presidente de los Estados Unidos, el Primer Ministro de Canadá, pero, aquí hay dos grandes ausentes: uno, Cuba. Cuba, cuyo delito ha sido luchar por la independencia, por la soberanía de los pueblos; Cuba, cuyo delito ha sido prestar solidaridad, sin condiciones, a nuestros pueblos. Y por eso se le sanciona, por eso se le castiga, por eso se le excluye; y por eso, yo no me siento cómodo en esta Cumbre, ¡no puedo sentirme cómodo en esta Cumbre! Siento vergüenza de estar participando en esta Cumbre, con la ausencia de Cuba. Otro pueblo que no está aquí presente, porque a diferencia de Cuba, una nación independiente, solidaria, ese otro pueblo está sometido todavía a las políticas colonialistas... me refiero al hermano pueblo de Puerto Rico. Llegará el día en que los pueblos latinoamericanos y caribeños, como ya está aconteciendo, donde ya se ha incorporado Cuba en el Grupo de Río, donde estamos trabajando para construir una gran alianza, una gran unidad de los pueblos latino-americanos y caribeños, llegará el día en que ahí también, en esa gran alianza, estará el pueblo de Puerto Rico. Tengo la convicción, tengo la seguridad, que ese día llegará".
Publicadas por R@S a la/s 10:41 a. m. View Comments